Oración de la Mañana

9 de mayo

 

Lectura del santo Evangelio según San Juan 

En aquel tiempo, dijo Jesús:
«Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. 

Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas, y nadie puede arrebatar nada de la mano de mi Padre. 

Yo y el Padre somos uno». 

 

Reflexión: 

Este pasaje nos invita a confiar en la guía y la protección de Jesús, sabiendo que como buen pastor, Él nunca nos abandonará. También nos desafía a escuchar su voz y seguirlo con fe y confianza. La declaración de la unidad de Jesús con el Padre nos recuerda la naturaleza divina de Cristo y su misión redentora. 

¿Realmente confías en Dios?