Oración de la Mañana

19 de abril

Lectura del santo Evangelio según San Juan 

En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Yo soy el buen pastor. El buen pastor da la vida por sus ovejas. En cambio, el asalariado, el que no es el pastor ni el dueño de las ovejas, cuando ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; el lobo se arroja sobre ellas y las dispersa, porque a un asalariado no le importan las ovejas.

Yo soy el buen pastor, porque conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí, así como el Padre me conoce a mí y yo conozco al Padre. Yo doy la vida por mis ovejas. Tengo además otras ovejas que no son de este redil y es necesario que las traiga también a ellas; escucharán mi voz y habrá un solo rebaño y un solo pastor.

El Padre me ama porque doy mi vida para volverla a tomar. Nadie me la quita; yo la doy porque quiero. Tengo poder para darla y lo tengo también para volverla a tomar. Éste es el mandato que he recibido de mi Padre’’.

Palabra de Dios

Reflexión:

¡Qué misión más hermosa nos muestra hoy el evangelio! Dar la vida por sus ovejas. Jesús es el modelo de pastor porque no busca su beneficio, sino que da su propia vida a todos los que aceptan su mensaje. Esa es la lección que podemos aprender de Jesús. Con amor todo es posible. El amor construye “puentes” de unidad, transforma y multiplica la vida, hace brotar vocaciones de servicio y entrega, mantiene la paz y no la guerra… Señor, haz brotar entre nosotros, las ovejas de tu rebaño, la fuerza del amor.