Oración de la Mañana

13 de mayo

EL CABALLITO DE MADERA 

En cierta ocasión, un padre llevó a su hijo a dar un paseo al bosque, como era pequeño, su papá lo llevaba sobre sus hombros, al rato lo puso a caminar para que se ejercitara y le dijo: debes caminar hasta la casa. 

Al poco rato, el niño empezó a llorar porque decía que estaba muy cansado y no podía dar “un paso más”. El padre cortó una rama de un arbusto en el bosque, la alisó con su navaja; y colocó un pequeño cordón en el extremo más grueso y le dijo al niño: – “Mira Hijo, aquí tienes tu propio caballo para que te lleve a la casa”. 

El niño, emocionado se animó, montó sobre aquel “caballito de madera” y comenzó a correr hasta llegar a la casa y aún después de llegar siguió corriendo por el jardín hasta que tuvo que irse a bañar y acostarse rendido. 

Nosotros vamos de paseo por esta vida, en ocasiones nos sentimos muy cansados y pensamos que no podemos seguir adelante. Entonces DIOS nos envía a alguien cercano para ofrecernos un “caballito de madera”. Todos necesitamos palabras y gestos que nos animen y nos alegren la vida cuando estamos tristes.